Nada vivifica tanto la oración como la prueba. Es la prueba la que nos pone inmediatamente de rodillas y cierra tras nosotros la puerta de nuestro aposento.
— Horacio Bonar.
Nada vivifica tanto la oración como la prueba. Es la prueba la que nos pone inmediatamente de rodillas y cierra tras nosotros la puerta de nuestro aposento.
— Horacio Bonar.
Siervo de Jesucristo por pura gracia. Ver más entradas